Esta es la pregunta que nos asusta más, desde cuando creamos #BertoLive.
Como nos da tanto miedo, hemos decidido enfrentarnos a ella directamente, nosotros mismos, para no hacer el ridículo de un cliente cualquiera que, sentándose en el capitoné de denim negro con botones de acero, deje caer el tema con disimulo, incluso evitando nuestra mirada con la excusa de admirar la mesita Circus con patas de acero cobrizo y cepillado mate:
– Perdona pero…¿qué tienen que ver los Ramones con un sofá Chesterfield?
En otras palabras:
– ¿Cómo se os ocurre poner una colección de discos punk rock, un frigorífico lleno de cervezas artesanales buenísimas y una guitarra eléctrica en una exposición de sofás, sillones y camas?
Vamos a salir del armario, mostremos nuestras cartas, declaremos el juego : los Ramones con el Chesterfield no pintan nada si quitamos… nuestra ardiente pasión por las dos cosas.
Y además, antes de juzgar, quizás sería conveniente tratar de escuchar Glad to see you go tumbados panza arriba en un sillón Emilia de piel negra de nobuk impresa con efecto vintage envejecido, mate.
Mejor aún con una cerveza de las buenas en la mano
¡Ver para creer! . Nosotros creemos en ello 😉