En la frase del título y en la foto de aquí abajo está todo.
Existe la idea de un trabajo artesanal finalmente digno de ser inmortalizado con una foto recuerdo.
Hay alguien que entiende de ello el valor, al punto de quererse retratar mientras es protagonista de ello.
Hay una situación que por fin enciende un reflector sobre quien trabaja en taller, con las manos, año tras año, durante una vida (emocionante el aplauso espontáneo de los presentes después de la frase de nuestro maestro artesano, Sr. Flavio “si, hago este trabajo desde hace 39 años”).
Hay un grupo de personas que pudiéramos definir «público», observando una elaboración artesanal del modo en que mirarían un espectáculo televisivo: con interés, curiosidad, diversión… y ganas de participar. Casi se podría decir: deseos de ganar.
Hay participación directa, hands-on, dirían los anglosajones.
La tercera sesión de #divanoXmanagua ha sido un día extraordinario, caracterizado por una participación más allá de toda expectativa, donde – todavía más que en las primeras dos sesiones – hemos sentido que nuestro trabajo gusta intensamente, interesa y es comprendido.
Y nosotros mismos comprendemos en los hechos cuanto ya sabemos en palabras: y es decir, que la comunicación del trabajo artesanal es aquello que lo puede calificar y acercar a las personas en el modo justo:
no más estereotipos ligados a tiendas pobres, sino con fuerza innovadora, propuesta, energía, tecnología, comunicación, jóvenes… futuro.
Como siempre, un “gracias” muy especial a nuestros colaboradores de proyecto Terre des Hommes Italia y Centro de formación AFOL, y también a las colaboradoras de la noche Girl Geek Dinners Roma, que han presentado durante el evento un interesante informe sobre la Responsabilidad Social de empresarial.
¡Aquí el storify de la noche y… ahora la cita es en Meda, jueves 14 de marzo, para la cuarta sesión de #divanoXmanagua!